La trombosis venosa es una patología de la sangre que afecta al sistema circulatorio. Se produce cuando una vena del sistema circulatorio queda obstruida como consecuencia de la formación de trombos o coágulos de sangre. Si la vena dañada forma parte del sistema venoso profundo se le denomina trombosis venosa profunda o TVP una enfermedad que requiere de un tratamiento para su resolución.

Las plaquetas y las proteínas de la coagulación son algunos de los componentes de la sangre que son responsables de mantener la fluidez y la integridad del sistema circulatorio venoso. Cuando se produce una herida en el cuerpo, las plaquetas se desplazan hacia la lesión y se concentran, activándose y reclutando a determinadas proteínas de la coagulación para formar un tapón y detener la hemorragia. Tras cumplir su objetivo de control del sangrado, otras proteínas serán activadas para eliminar el tapón formado y restablecer el flujo sanguíneo. El equilibrio adecuado de estos elementos permite detener el sangrado e impide la formación de trombos en exceso o patológicos.
Las venas profundas de las piernas son las más afectadas por la trombosis y entre las causas más comunes o factores de riego de esta patología cabe destacar la edad, el tabaquismo, el sedentarismo, el sobrepeso, el consumo de anticonceptivos orales, la genética, los antecedentes familiares de trombosis y tener un diagnóstico de cáncer. Además, recientemente todos hemos oído hablar de cómo la infección por COVID19 también predispone a un riesgo de padecer trombosis venosa.
Por tanto, resulta básico tener conocimientos de este problema para identificar los signos de alarma y acudir al medico en caso de presentarlos. Esta patología, en principio, puede controlarse y tratarse con un diagnóstico temprano y adecuado. Sin embargo, existe el riesgo de que los trombos se desprendan de las paredes de los vasos sanguíneos y viajen a través de ellos por el resto del cuerpo hasta alojarse en órganos vitales como los pulmones. Dando lugar a una tromboembolia pulmonar que puede ser una patología muy grave.
En definitiva, la identificación de los problemas que puede causar la trombosis venosa y fundamentalmente seguir unos hábitos de vida saludables puede ayudarte a prevenir la aparición de la trombosis. Desde nuestra consulta de Hematología queremos compartir contigo algunos consejos preventivos.
Consejos para prevenir la trombosis

Practica ejercicio y evita pasar demasiado tiempo sentado o en reposo.
Como comentábamos, uno de los principales factores que influyen en el desarrollo de la trombosis es el sedentarismo. Por ello te recomendamos pasar el menor tiempo posible sentado y realizar ejercicio físico regularmente, ya que la actividad física contribuye al correcto funcionamiento del sistema circulatorio, entre sus muchas otras ventajas. Por tanto, para prevenir la trombosis te animamos a caminar diariamente durante unos 30 minutos, una actividad asequible para todas las edades y con escasos riesgos de lesión.
Cuida tu peso y tu alimentación
El sobrepeso es otro de los grandes aliados de la trombosis ya que cuanto mayor sea tu peso mayor será también la presión a la que estarán sometidas las venas de tus piernas. Además, de que la obesidad y los malos hábitos alimenticios aumentan las probabilidades de padecer desajustes en los niveles de colesterol y triglicéridos que, al mismo tiempo, contribuyen a la obstrucción de arterias y venas. De ahí que sea fundamental para prevenir la trombosis tener un peso adecuado, lo cual se consigue a través de una dieta equilibrada y de la práctica diaria de deporte. Además, es recomendable una buena hidratación diaria.
Te recomendamos para prevenir la trombosis: dieta sana e ingesta hídrica diaria.
Deja de fumar
El tabaquismo es un hábito muy nocivo para la salud y contribuye al desarrollo de numerosas patologías no solo del sistema circulatorio sino también del respiratorio y cardiovascular. Por lo que dejar de fumar no solo te ayudará a evitar la aparición de coágulos y trombos sino también a gozar de un estado físico saludable.
Recuerda que tus antecedentes médicos son relevantes
Debemos tener presente que nuestros antecedentes familiares o personales, la medicación que tomamos habitualmente (hormonoterapia o anticonceptivos) o ciertas enfermedades suponen una carga de riesgo de trombosis. Cuando acudimos a la consulta y nos preguntan por nuestros antecedentes y tratamiento habituales, no debemos olvidar referirlos, ya que, en determinados contextos, esta información es relevante para que los médicos valoren si se debe realizar una prevención de la trombosis venosa pautando medicación.
En nuestra consulta de hematología somos especialistas en la prevención, diagnóstico y tratamiento de la trombosis y los coágulos. No dudes en contactar con nosotros. Estaremos encantados de estudiar tu caso y responder todas tus preguntas.
